Hoy vamos hablar sobre Adobe y Figma, ya que Adobe (ADBE.O) ha decidido cancelar su acuerdo de 20 mil millones de dólares para adquirir la plataforma de diseño basada en la nube, Figma. La razón principal es la falta de claridad en el proceso de aprobación antimonopolio en Europa y el Reino Unido. Este acuerdo, que se anunció en septiembre del año pasado, habría sido una de las mayores compras de una startup de software.
El acuerdo, que involucraba una combinación de efectivo y acciones, fue objeto de escrutinio por parte de los reguladores. Estos se muestran preocupados por las adquisiciones de grandes tecnologías, ya que pueden aumentar el poder de mercado de las empresas dominantes o afectar a nuevas empresas que podrían considerarse competidores emergentes.
Adobe acordó pagar una tarifa de cancelación de mil millones de dólares a Figma, con sede en San Francisco. Figma es conocida por su plataforma colaborativa basada en web utilizada por empresas como Uber (UBER.N), Coinbase (COIN.O) y Zoom Video Communications (ZM.O) para el diseño y la generación de ideas.
Figma ha experimentado un crecimiento significativo, aumentando su equipo de 800 a 1300 personas el año pasado. Se proyecta que la empresa aumentará sus ingresos recurrentes anuales en un 40%, superando los 600 millones de dólares este año, según una fuente cercana al asunto. Además, la compañía ha logrado mantener un flujo de caja positivo, una métrica clave para que los inversores del mercado público evalúen posibles candidatos para una oferta pública inicial (OPI).
Obstáculos regulatorios y tarifa de terminación
Tanto Figma como Adobe han aprovechado la tendencia de la inteligencia artificial generativa. Figma ha introducido nuevas funciones a medida que se expande hacia el desarrollo de software, mientras que Adobe ha lanzado herramientas de fotografía generativa como Adobe Firefly.
El mes pasado, la Autoridad de Mercados y Competencia de Gran Bretaña (CMA) expresó que el acuerdo tendría un impacto negativo en la innovación del software utilizado por la mayoría de los diseñadores digitales en el Reino Unido. Esta preocupación refleja inquietudes similares de la Unión Europea sobre la posible disminución de la competencia.
Según fuentes cercanas al tema, ambas compañías han estado en comunicación constante con agencias antimonopolio en el Reino Unido, la Unión Europea y Estados Unidos para buscar una solución que permita concluir el acuerdo. Sin embargo, en las últimas semanas, los reguladores del Reino Unido han señalado que sería necesario que Adobe tome medidas para desprenderse del diseño de Figma, que es un elemento central de la adquisición.
A pesar de un aumento del 1% en las acciones de Adobe, la empresa se ha mostrado reacia a ofrecer soluciones a la Autoridad de Mercados y Competencia (CMA) del Reino Unido, argumentando que cualquier medida para preservar los beneficios del acuerdo no sería suficiente para abordar las preocupaciones planteadas por la CMA.
Varios analistas dijeron que la terminación subraya cómo un escrutinio más estricto de las fusiones y adquisiciones también podría arruinar oportunidades para las nuevas empresas.
Reacción pública y especulaciones futuras
La cancelación de la fusión ha generado un gran alivio en la comunidad en línea, donde los usuarios expresaron su felicidad por evitar que Adobe adquiera un mayor control en la industria de herramientas de diseño, considerando su dominio en otras áreas del diseño. Previamente, se habían expresado preocupaciones sobre posibles incrementos en los costos de los servicios, recordando el modelo de precios actual de Adobe para Photoshop.
Aunque Figma mantiene su independencia por ahora, hay especulaciones en el mercado sobre la posibilidad de que otros actores importantes, como Microsoft, puedan presentar ofertas por Figma en el futuro.